Junto con mi colega, la eurodiputada socialista Alicia Homs, he pedido cobertura sanitaria para todos los grupos de la sociedad, incluidos los más vulnerables como niños o personas sin hogar, así como una mayor cooperación entre los sistemas nacionales. Las personas más vulnerables están excluidas de la cobertura sanitaria, lo que es inaceptable y no respeta el marco de los derechos humanos internacionales.
Durante la presentación de un informe de Médicos del Mundo en el Parlamento Europeo, hemos denunciado que exista una clara relación entre las personas sin hogar, las condiciones laborales precarias y las barreras a los servicios de salud.
En este sentido, hemos puesto de relieve las diferencias entre los Estados miembros de la Unión Europea, así como en la forma en que se administran sus sistemas de salud, generalmente por razones históricas. Esto conlleva profundas implicaciones para los desempleados o las personas sin hogar que no pueden pagar primero y ser reembolsados después.
El informe recoge que casi el 45% de las personas estudiadas declararon estar en situación de vivienda precaria y el 7,5% eran menores de 18 años. Iniciativas como la garantía infantil sólo serán eficaces si los padres y las madres de estos jóvenes también participan y tienen acceso a la salud.